“CYRIL, MI PACIENTE, MI AMIGO”

“Lo que estamos viviendo siguiéndolo a Cyril y al Dakar, no se puede creer, cuando íbamos por la ruta hacia Colón el primer día, la gente nos veía llegar a cualquier lugar y nos aplaudía, nos sacaban fotos, firmamos autógrafos. Les explicamos que no somos pilotos, que sólo seguimos el Dakar, pero no lo entendían". El que habla con VisionAuto es Santiago Raggio. Un personaje de esos que depara la impresionante aventura.

Santiago es argentino, médico especialista en traumatología y ortopedia, vive en España y, entre sus pacientes, cuenta nada menos que con una de las grandes figuras del Dakar, Cyril Despres; el puntero en la general de motos. Raggio tiene 40 años, es oriundo de Pehuajó y está casado con María Elena Sanz con la que tiene un hijo de 3 años y otro en camino.


En el 2000 una beca gestionada por un gran amigo, el Dr. Alberto Dr Cid Casteulani, un destacado especialista de nuestro país también en Ortopedia y Traumatología y presidente de la Sociedad del Trauma, cuyo equipo integró Santiago, le permitió viajar a Barcelona. Allá se especializó en el Instituto Universitario Dexeus. “Estuve 4 años y al finalizar mi formación, a la espera que mi señora terminara sus estudios de Odontología en la Universidad de Barcelona, gané una plaza para trabajar en el Hospital Nuestra Señora de Meritxel del Pricipado de Andorra", dice Raggio.

“¿Cómo nació la amistad de este médico con Cyril Despres, y de que forma se acercó a las motos?. "Mi relación con las motos comenzó cuando Cyril acudió a mi consultorio, ¡yo no sabía quien era!. Cuando terminó la consulta, mi secretaria me comentó que era el piloto que había ganado el Dakar. Así que cuando regresó a los pocos días con unos estudios que le pedído, empecé a preguntarle muchas cosas sobre el Dakar. Siempre he seguido esta carrera, me encanta. Bueno, conversamos tanto que terminó invitándome a su casa, y al taller a ver sus motos, es fue el punto de partida de una buena amistad".


Despres le regaló gran parte de su indumentaria, casco y otros implementos, "también me recomendó en su momento, con que moto empezar a entrenar. Desde ese momento comencé‚ a seguirlo a Cyril, a quien continúo atendiendo". Tuvo que regresar a La Argentina por razones personales, estuvo tres años y volvió a Andorra. Al venir se había traído su moto que, debió dejar al regreso. Cyril "me vendió la suya y me la preparó, es con la que ahora estoy dando la vuelta con el Dakar en paralelo. Esta experiencia de vivirlo con amigos, no tiene precios, no la olvidaré jamás”.

Para concretarla, la debieron remar en serio, “hace 9 meses con mis amigos Patricio Moran (argentino residente en Andorra) y Antonio Riba decidimos organizar el seguimiento del Dakar; no fue fácil, el tema de siempre los costos, nos hizo todo cuesta arriba. As¡ que decidimos crear Adventureraid.com y publicar en un foro la idea de hacer el Dakar en paralelo. Así se fue sumando gente, 3 pilotos ingleses, uno español, un amigo y piloto argentino de Pehuajó, Fernando Lian, un inglés y otro argentino de Juan José Paso, también Marcelo Degiovanangelo; el padre de Patricio es nuestro chofer de la 4x4".


En el paso por Fiambalá, Raggio pudo entrar al vivac invitado por Despres, "comimos con los pilotos, vimos los talleres, una experiencia fenomenal, durante toda la noche nadie descansa, todo el mundo trabaja. De Fiambalá cruzamos la Cordilllera de Los Andes por el paso San Francisco, una región hermosa por los contrastes de colores y unos caminos de ripio y arena para poder dar "gas" a la motor!!". Todo para satisfacer la gran pasión del médico, que intenta olvidar pronto, el importante robo padecido en Copiacó cuando entraron a un supermercado y dejaron todas sus pertenencias en una 4x4 que los asiste. "Nos rompieron un vidrio mientras comíamos y nos robaron cascos, protecciones, ropa de rally, gps, notebooks con sistema de navegación, cartografía, pasaportes y papeles de las motos y celulares, no entendíamos nada". Debieron hacer las denuncias y trámites ante un fiscal de la justicia chilena, en la policía y en la Embajada Argentina. Esperaron contar con otra ropa especial y algunos implementos, en Copiapó mismo la empresa inglesa Desert Rose Racing "nos facilitó el material para poder seguir. Raggio junto a sus amigos, como los que corren el Dakar, buscan a Buenos Aires como destino final, “no sabés el asado que nos vamos a comer con Beto (Cid Casteulani, el médico amigo) cuando termine la carrera, je".

La pasión por las motos, el Dakar, y las ganas para que su amigo y paciente Despres, coseche la victoria, llevó a Santiago a “correr” el rally en paralelo. La del médico Raggio, es otra historia de las que origina el Dakar.

11-01-2010