LA NOCHE DEL BUEN GUSTO

Mientras Pechito López, Mariano Altuna y demás se iban a la cama en Olavarría, a palpitar la alborada de una fecha crucial para el Turismo Carretera, medio millón de personas celebraban en Buenos Aires una de las noches más excitantes y refrescantes de la temporada, la Noche de los Museos. Ni los fierreros quedaron exentos de la propuesta, una idea que nació en Berlín en 1977 y que en los años que lleva sacudiendo las estrellas del firmamento porteño ha decuplicado la cifra de entusiastas.

Y los fierreros tuvieron su propia noche museológica porque Citroën decidió conmemorar sus noventa años de vida con la presentación del Museo André Citroën, que reseña la actividad de la marca en casi un siglo de actividad, en el Planetario porteño. La ocasión fue magnífica para volver a ver, en movimiento, coches clásicos de la marca y para sentir, de paso, que una actividad tan pujante como la que genera el automóvil, puede encontrar su propio espacio en una velada en la que la cultura y el interés masivo fueron protagonistas absolutos.


Desde un C4 partido al medio para que la gente pudiera descubrir en detalle la anatomía de un coche bien actual, hasta una oleada de 2CV en los colores que te imagines, sin olvidar otros modelos emblemáticos de la marca, como el 5CV, el DS21 (“el auto de los ingenieros, el auto de la gente que piensa, por lejos el auto más moderno del mundo, no solo en 1955 sino al menos por quince años hasta que aún otro Citröen mucho más ingenioso emergiera del más lógico y libre de los equipos de diseño” según escribió el fabuloso historiador inglés L.J.K.Setright en su “Drive On”, ‘Historia social del automóvil’, Granta Books, Londres, 2002) o los familiares Mehari o Ami 8. Además, todo un recorrido audiovisual por los pasillos del observatorio permitió recorrer la historia de la marca y, acorde al sitio, proyectar el futuro: la historia de la marca quedó reflejada en un video expuesto ¡en el techo del Planetario!


Luis Basavilbaso, director general de la marca en la Argentina, confirmó que la nueva serie DS estará en el país en 2011 cuando condujo la entrega de los premios Citröen Creative Technologie, a los trabajos más interesantes que propusieran un diseño del habitáculo para la próxima década, entre los que se vieron ideas provocativas e innovadoras. “Espero que el Museo Citroën sea el más atractivo” se ilusionó Basavilbaso. Con 150 museos abiertos en la noche, la competencia resultó cerrada, aunque leal.

Fue una noche sin perdedores.